Un nuevo cónclave católico ¿está cerca?
El Papa Francisco aun respira y, según fuentes del Vaticano, ha mejorado levemente, sin embargo, se especula sobre un inminente cónclave.
Seis nombres suenan con fuerza para imponerse en el claustro, en el caso de que el Papa Francisco, y la medicina, no logren vencer las infecciones pulmonares que lo aquejan y parta al encuentro con Dios.
La iglesia católica (según el portal vatican news – https://www.vaticannews.va/es/vaticano/news/2024-04/crece-la-cantidad-de-catolicos-en-el-mundo-ahora-son-1390-millon.html ) está conformada por más de 1300 millones de personas en el mundo. El cristianismo es considerada la religión más numerosa, con 2500 millones de personas y, además de los católicos, se cuentan los protestantes, ortodoxos y otras religiones afines.
Suficientes datos existen para validar la relación de la iglesia católica con el poder político, cuestión que no ha variado en nuestros días. Por lo que, la sucesión de su máximo jerarca impacta en el modelaje espiritual de buena parte de la humanidad, pero también en el equilibrio de poder que se ejerce sobre las sociedades.
Como vimos en la trama de la película Cónclave, la elección de un Papa no obedece a simpatías, ni a un concurso de oposición de conductas y valores católicos certificados para ver quién es el mejor, se trata de un acto estratégico que busca colocar a la figura ideal que mantenga, defienda, proteja la imagen de la iglesia y, a su vez, la haga crecer en número de personas seguidoras de su fe.
Hoy, ¿quiénes muestran sus nombres para un posible cónclave?:
- Cardenal Pietro Parolin. (Italiano)
- Cardenal Peter Erdö. (Húngaro)
- Cardenal Luis Antonio Tagle. (Filipino)
- Cardenal Matteo Zuppi. (Italiano)
- Cardenal Raymond Leo Burke (EEUU)
- Cardenal Pierbattista Pizzaballa (Italiano)
Lo que se escucha:
- Los favoritos de Francisco: Pietro Parolín y Matteo Zuppi.
- La revelación: Luis Antonio Tagle.
- El inspirado: Pierbattista Pizzaballa
- Los batacazos: Raymond Leo Burke o Peter Erdö.
Hasta ahora ninguno es de “piel oscura” como dice Nostradamus en las profecías que aluden al último Papa de la iglesia católica.